sábado, marzo 31, 2012

Encuentro


(para una hermana centroamericana)

Al lado del charco con tiburones una china florece con ron de Galeón.
Pararon los pinos, y la columna vertebral quedó partida por tu sonrisa.

En San José nacieron montañas para verte, tomarte en un trago amargo, hermano.

Acá estamos asustados de la insolencia revoltosa del viento ajeno,
de la vida en sangre combativa, que recorrió ríos de campesinos pobres.

Yo estoy esperando en la idea de tomar dos fronteras de la mano y besarlas.

De ver el horizonte a través de las montañas, y ver por debajo de tu falda.

Te beso el cuello, he imagino fusiles para bajar mangos, con ese olor a mordisco carnoso.

La madrugada me sorprende con un mismo lenguaje, te veo sentada en la nada,
en la confusión de buscar compañía sentada en la nube llorosa de invierno.

Yo, estando en la idea de practicar verdades me veo descubierto con tu pecho desnudo,
con tu belleza ajena de frío capitalino, te toco con mi piel bastarda.

lunes, marzo 26, 2012

lamentos de un comunista sectario


Estaba leyendo analogías pasadas y las letras caminan y se tira por un precipicio.
Ayer estaba pegándolas con esperma pero el papel rebelde se moja y deja al objeto cubierto de pasado inútil. Mi configuración se transforma cada hora, y cada tristeza se actualiza con el vació perpetuo que me impulsa a leer marxismo y escuchar trova comunista. La razón en este mundo se convierte en una praxis revolucionaria, mientras paralelo al corazón están mis recuerdos de viejas compañeras y amigas de viaje, que hacen sentir mi sectaria práctica como un inútil esfuerzo de compañía.
Necesitamos sentirnos acompañados de nuestros principios, de nuestras razones para sentir cansancio en el cuero. Mis letras se inscriben en una serie de factores, una dialéctica materialista de la historia, aun cuando tengan un olor a abstracción indescifrable, e inclusive contradictorias que me ayuda a escapar de esta terrible pena que es acompañar al cuerpo y la mente en este camino de liberación perpetua en la cual me inscribo.

sábado, marzo 17, 2012

Confundido


A veces siento el frío de la montaña con tu cuerpo ausente.
Me duele que la memoria se escribe en mi en tinta china,
el papel está gotiando la dinámica dialectica materialista,
veo la realidad con un resto de religión en mi,
no me queda más que agarrar la vida y apretarla con mis manos,
desangrarla para que pueda ver el caño caminando al mar.

martes, marzo 13, 2012

Café y Reloj

Cuando entraron en las fábricas se besaron.
Se quieren y punto.

Antes eras gigante, yo soy negro como el caribe:
negro, más negro que la Coca Cola.

Esos hombres gastados, suenan rítmicamente al son
de las oligarquías cafetaleras!

Pero mi ritmo (tic tac tic tac tic tac) mi ritmo especial
yo te despierto a las 5 me encuentro con vos a las 6....

A las diez te miro apasionadamente, y acompaño el puro
con despertar encadenado, con látigo de muñeca.

Somo el matrimonio de la  tristeza, de la vida drogada, medida....

lunes, marzo 12, 2012

América Central

La cordillera divide el centro en dos mitades.

Estás sangrando coco en el caribe
fumando tabaco entre tambores jamaiquinos.

Un colorante azul europeo sangran los indios:
Pitufos rebeldes sobre la iglesia de la pirámide.

En las llanuras te veo entre cafetales profundos:
hablas extraño, ausente de tu sangre.

Sin embargo, los fusiles de amor te ven sufrir,
te ven luchando en la oscuridad de tu cama fría.

Estás paralizada por los barcos de oro,
por los saqueos necesarios entre las matas.

Hueles a cafetales de banano.

jueves, marzo 01, 2012

Amor Lluvioso

Subiendo en libertad para condensar mis lagrimas
azules y rojas, saladas y con sabor a mar,
amándote como la brisa mojada de invierno,
en esos calores amarillos, que te tocan por debajo,
Quiero verte.

Corren por los caminos de piel morena,
como tratando de tocarte sin tocarte,
viéndote desde la superficie y a veces,
me quitas con las manos inconscientes, y a veces,
entro por tus ojos, por tu boca,
Quiero verte.

Estoy como perro huérfano, libre y maloliente,
esperando que mi cola alegre deje de engañarme,
sintiéndote en mi caminar aleatorio por las calles,
acompañado por miles de fríos desconocidos,
esperando el momento que deje de llover.
Quiero verte.

Pasé por tu olor, y lloraron mis ojos,
pasé por sitios nostálgicos, y lloraron mi ojos,
pasé por tu amor, y el diluvio cayó y no cesa,
Quiero verte.

Martes 23 de agosto de 2005
San José, Costa Rica